Gobernanza de las IFI

Análisis

Dicen una cosa pero hacen otra: Asesores del FMI aconsejan la protección de los trabajos y e

18 octubre 2010

Mientras que Hungría se deshizo del FMI, Grecia todavía sigue la línea de las demandas de austeridad de la institución. El FMI ha suavizado su retórica en algunos lugares, en particular sobre el desempleo, pero los críticos se preocupan de que muchos funcionarios de la institución aún están empujando la reducción fiscal que puede perjudicar las perspectivas de crecimiento.  

El populista primer ministro de Hungría, Viktor Orban, suspendió el programa de su país con el FMI a finales de julio (ver Boletín 66), declarando que Hungría necesitaba “restaurar su autodeterminación económica.” Orban, líder del partido Fidesz, ganador de las elecciones nacionales en abril, había hecho campaña en una plataforma contra el acuerdo de austeridad del FMI con Hungría.

Los funcionarios húngaros habían culpado la baja meta de déficit fiscal del 2,8 por ciento que el FMI y la Unión Europea empujaban para 2011, pero informes en los medios citaron desacuerdos sobre los impuestos bancarios propuestos por el Gobierno como la verdadera razón de la disputa. El Gobierno está introduciendo un gravamen bancario para recaudar 200.000 forints (710 millones de euros) para ayudar a cerrar la brecha fiscal, en lugar de recortar aún más el gasto público. El sector bancario de Hungría casi en su totalidad es propiedad de los bancos europeos occidentales. El FMI argumentó que el impuesto “probablemente afectará negativamente los préstamos y el crecimiento”, a pesar del leve apoyo desde el FMI para otros gravámenes bancarios introducidos en Europa (ver ver Boletines 72, 71).

coordinated strikes and protests against IMF and EU economic policies

El LMP, un nuevo partido verde formado por antiguos dirigentes de ONGs, aprobó la posición firme del Gobierno contra las instituciones internacionales, pero cuestionó la agenda política que estaba teniendo el Fidesz. El LMP dice que los planes para “estimular el consumo de las clase ricas y más adineradas mediante la introducción de un impuesto sobre la renta de tarifa plana, disminuyendo considerablemente los impuestos de las empresas y aboliendo el impuesto a la herencia son inadecuados e insuficientes para reactivar el desarrollo económico.” El LMP hizo un llamado al Gobierno para “que evitara recortes de presupuesto en los sectores sociales y educativos que pondrían en peligro la reproducción del capital humano.”

Continúa la austeridad en Europa

El Gobierno griego pasó su primera revisión por el FMI y la Unión Europea en septiembre de 2010 (ver Boletín 71). El Gobierno ha procedido con los planes requeridos por el acreedor para reducir las pensiones, y ahora debe “presentar un plan detallado de privatización, con cronograma y normas”, para el final del año. Esta privatización incluirá los ferrocarriles, los sectores de electricidad y gas, los servicios de agua para dos ciudades importantes, la oficina de correos y numerosas otras empresas estatales. La economía griega ya había caído en una recesión profunda, incluso antes de que las medidas de austeridad requeridas por el MFI y la Unión Europea realmente empezaran a apretar. A comienzos de septiembre de 2010, las cifras del PIB del segundo trimestre mostraban un descenso del 3,7 por ciento en comparación con el año anterior.

Petros Kosmas, profesor de la Universidad Libre Varna, de Chipre, expresó su preocupación de que el enfoque del IMF-UE fuera contraproducente. “Existe un inminente peligro de que la recesión resultante en Grecia dará lugar a la misma situación que se pretendía evitar, es decir, la suspensión de pagos.” Un informe a comienzos de septiembre: La zona del euro: entre la austeridad y la suspensión de pagos, producido por el grupo de académicos Investigación sobre el Dinero y las Finanzas, argumenta que debería considerarse activamente la posibilidad de la suspensión de pagos inducida por los deudores. “La suspensión de pagos, la renegociación de la deuda y la salida de la zona del euro tienen consecuencias muy graves. Éstas deben sopesarse contra las igualmente graves consecuencias de la recesión y el estancamiento a largo plazo de varios países de la zona del euro.”

Huelgas esporádicas estallaron en toda Grecia durante todo el verano, incluyendo una huelga general a finales de junio y más protestas durante la visita de la misión del FMI a finales de agosto. Otra huelga masiva general está prevista por los sindicatos griegos para finales de septiembre, la cual está siendo coordinada con otras huelgas y protestas contra las políticas económicas del FMI y la Unión Europea, previstas en Ucrania, Serbia, España y por la Confederación Europea de los Sindicatos belgas.

Los sindicatos rumanos organizaron una protesta de 20.000 personas contra las medidas de austeridad en Bucarest, en otra fecha a finales de septiembre. Liviu Apostoiu, de la Confederación Sindical rumana Cartel ALFA, argumentó que el programa del FMI en su país había “profundizado la recesión, la crisis financiera y la pobreza, y llevado a una reducción dramática del empleo.” El préstamo rumano caduca el próximo año en mayo, y el presidente rumano cree que el Gobierno debe renovarlo. Apostoiu no está de acuerdo “un nuevo acuerdo con el FMI no es necesario. Un nuevo préstamo… sólo empeoraría el nivel de la pobreza y la crisis económica.”

Los sindicatos ucranianos también han pasado a la ofensiva contra el programa de su país con el FMI, diciendo a mediados de agosto, que el trato con el FMI “interfiere cínicamente en la política interna de un estado soberano” y que las condiciones deben ser renegociadas. En Letonia, el líder del partido Centro de Harmonía, quien lleva la delantera en las encuestas antes de una elección a comienzos de octubre, hizo un llamado para que se renegociaran los términos del acuerdo con el FMI. Hasta el gobernador del banco central manifestó su opinión diciendo que los planes de privatización requeridos por el FMI eran “imperdonables.”

Se trata del empleo, necios

A pesar de las duras demandas que hace a los países prestatarios, el FMI ha estado mostrando una cara más suave en algunos escenarios, especialmente cuando el director general, Dominique Strauss-Kahn, toma la palabra. A mediados de septiembre de 2010, el FMI fue el anfitrión de una conferencia conjunta con la Organización Internacional del Trabajo (OIT) en Noruega, sobre los desafíos del crecimiento, el empleo y la cohesión social. En el documento conjunto de la conferencia, el FMI declaró “el costo para aquellos que se quedan sin empleo podría ser una pérdida persistente en los ingresos, una expectativa de vida reducida y menor rendimiento académico y de ingresos para sus hijos. El desempleo también puede afectar las actitudes socavando la cohesión social, un costo que todos pagarán.”

El FMI argumenta que “la recuperación de la demanda agregada es la mejor cura para el desempleo”, y además que “la mayoría de las economías avanzadas no debe apretar sus políticas fiscales antes de 2011, porque el endurecimiento demasiado pronto podría socavar la recuperación.” Sin embargo, el informe preparado por el personal del FMI todavía pide el recorte de los sueldos de funcionarios públicos y de los gastos gubernamentales. También afirma que “los ajustes fiscales normalmente han tenido un efecto reductor de la desigualdad a largo plazo.” OIT en su parte del documento por otro lado refuta lo anterior y pide un aumento real en los sueldos, y una cuota salarial del ingreso nacional si se aumenta la demanda agregada y se disminuye la desigualdad.

Sharan Burrow, el secretario general de la Confederación Internacional de Sindicatos, hizo un llamado al FMI para que “animara a los países, incluyendo a los que reciben préstamos del Fondo, a adoptar y mantener políticas de estímulo de trabajo intensivas, hasta que la recuperación sea autosuficiente y el desempleo haya caído a los niveles anteriores a la crisis.”

La austeridad de obstáculo

Este es un eco de algunos de los consejos contenidos en una nota de posición del personal del FMI a comienzos de septiembre, sobre el espacio fiscal en las economías avanzadas. La nota calculó un límite de deuda teórico más allá del cual las deudas de un país caerían en una espiral fuera de control. Sólo en Grecia, Italia, Japón y Portugal están los pronósticos de deuda actual cercanos a los límites de la deuda calculada, así que la mayoría de los países más avanzados todavía tenían espacio fiscal y sólo necesitarían un ajuste a mediano plazo.

Sin embargo, “el análisis abstracto depende del riesgo (rollover) de refinanciación y de liquidez,” lo que significa que un país por debajo de los límites todavía podría entrar en una crisis de la deuda si los mercados de bonos pierden la fe en el gobierno. Esto es lo que muchos analistas suponen sucederá en Grecia, la cual todavía paga mucho más interés en los mercados de bonos que el Gobierno alemán paga por sus bonos. Este riesgo provocó la recomendación en la nota de personal del Fondo por un ajuste fiscal más rápido.

Otro documento del personal del FMI a comienzos de septiembre, sigue con la llamada de siempre sobre el corte en los gastos. Hablar de la suspensión de los pagos en las economías avanzadas es “innecesario, indeseable y poco probable”, dice el documento, y agrega “el desafío deriva principalmente de los grandes déficits primarios de las economías avanzadas, y no de una alta tasa de interés promedio de la deuda.” Sin embargo, si el paquete de austeridad estilo FMI adoptado en Irlanda a principios de 2010, sirve de guía, cuando los países cortan drásticamente sus gastos pueden empujar sus economías hacia otra recesión, y con ello no evitan las crisis de la deuda soberana, las cuales tiene causas múltiples (ver Boletín 71).

A pesar de la crisis de los empleos y del desempleo, y de la reconocida necesidad de proveer más estímulo para el sector, el FMI está exigiendo a muchos países que adopten de inmediato los paquetes de austeridad. El Fondo ha afirmado repetidamente que ya no están utilizando el enfoque de la ‘talla única’, pero pueden estar entrando en una era de dualidad. Cuando habla Strauss-Kahn el mensaje es sobre la protección de las personas y el empleo, pero cuando muchos de los miembros del personal del Fondo asesoran a los ministerios de finanzas, siempre es sobre cómo reducir los gastos.