El sector privado

Noticias

El mecanismo de arbitraje del Banco Mundial, CIADI, falla a favor de El Salvador

15 febrero 2017 | Traducción: Gustavo Alzugaray

En octubre de 2016 el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias relativas a Inversiones (CIADI), un brazo del Banco Mundial para el arbitraje de disputas Estado-inversor, anunció que el recurso de 2009 presentado por Pac Rim Cayman contra El Salvador no tenía mérito (véanse el Observador de otoño de 2015 y verano de 2014). El CIADI sentenció que El Salvador no debería pagar a la empresa los USD 250 millones que buscaba y, en su lugar, ordenó a la empresa a pagar USD 8 millones para cubrir la mayor parte de los costos legales. En 2009 la empresa, hoy propiedad absoluta de la empresa canadiense-australiana OceanaGold, llevó a juicio a El Salvador por la pérdida de potenciales ganancias luego de que El Salvador decidió no otorgarle un permiso minero porque la empresa no cumplía con las exigencias de la normativa.

El papel del CIADI y de otros centros de disputas Estado-inversor, que habilitan a los inversores extranjeros a demandar a los Estados en los tribunales internacionales si se sienten tratados de manera injusta, ha sido duramente criticados, en particular en América Latina, donde Bolivia, Ecuador y Venezuela se han retirado del acuerdo (véase el Boletín de diciembre de 2013). En una entrevista de octubre de 2016 en el periódico The Guardian, Manuel Pérez-Rocha, del Institute for Policy Studies de Washington, declaró que “el hecho de que la sentencia demore más de siete años y que un país con tantas dificultades económicas como El Salvador haya tenido que pagar millones para defenderse es inmoral y muestra la absoluta arbitrariedad con la que operan estos tribunales patrocinados por el Banco Mundial y su infame CIADI”. En reacción a las noticias en un comunicado de prensa, la Mesa Nacional Frente a la Minería Metálica de El Salvador, lamentó que “ya se hayan producido daños irreparables a las comunidades de El Salvador”.