El objetivo del Proyecto del Gasoducto de África Occidental (WAGP), de $600 millones, es llevarle gas a Nigeria a través de un gaseoducto de 680 kilómetros hasta un punto terminal en Takoradi, Ghana. Este gasoducto corta a través de y tiene un impacto en los Estados de Ogun y Lagos en el suroccidente de Nigeria.
WAGP está conectado con el existente gasoducto Escravos-Lagos de propiedad de la Corporación Nacional de Petróleo de Nigeria (NNPC – Nigeria National Petroleum Corporation), en Alagbado Tee al norte de Lagos. Este proyecto está diseñado para sustituir el gas natural de Nigeria por combustibles alternativos para los sectores energéticos, industriales, mineros y comerciales en Ghana, Togo y Benín. Es parte de la estrategia de asistencia regional de integración del Banco Mundial y complementa el proyecto elÚctrico de África Occidental. La Asociación de Desarrollo Internacional y la Agencia Garantía de Inversión Multilateral del Banco Mundial, proveen $50 millones, más $75 millones en garantías de préstamo al Gobierno de Ghana y a la Compañía del Gasoducto de África Occidental respectivamente. Estas garantías al riesgo financiero y político salvaguardan las inversiones de las compañías transnacionales de petróleo ChevronTexaco y Shell.
Las comunidades locales y los grupos de la sociedad civil en Nigeria, Ghana, Togo y Benín siempre han dicho que este Proyecto va a sumirlas aún más en la pobreza, que intensificará la degradación del medio ambiente local y distraerá la atención y los recursos del asunto vital de la reducción de las llamaradas de gas. Shell y ChevronTexaco han estado operando en el área de Escravos del Delta de Níger durante más de cincuenta años, durante los cuales han sometido a las comunidades a una continua contaminación gaseosa en una escala sin precedentes. Nigeria pierde unos $2.500 millones anualmente debido a la falla de compañías como ChevronTexaco y Shell al no utilizar o reinyectar el gas asociado. Esta suma no tiene en cuenta el costo para el sector de la salud, para el medio ambiente y para los medios de vida de las comunidades locales que están sometidos a las rugientes y ardientes llamaradas tóxicas de gas.
No se esperaba que las comunidades de Nigeria se quejaran!
El Banco Mundial promueve la iniciativa global de reducción de las llamaradas de gas, por lo tanto es extraño que el mismo Banco apoye un proyecto que habrá de intensificar las llamaradas en estas comunidades. El gas natural para el gasoducto provendrá de las operaciones existentes de Shell, ChevronTexaco y de las operaciones conjuntas (joint ventures) y de las operaciones conjuntas de NNPC en el área de Escravos. Estas siete facilidades existentes fueron diseñadas y construidas para utilizar gas no asociado.
No hay evidencia de la construcción de una facilidad para recoger gas asociado en el área de Esclavos, o de una conexión a esta facilidad que permitiera a WAGP utilizar las existentes llamaradas de gas asociado.
Las comunidades locales y los grupos de la sociedad civil le pidieron al Panel de Inspección que investigara la falla del Banco para seguir sus políticas y procedimientos establecidos. El Panel ya visitó tres veces a Nigeria, la última de éstas en julio de 2007. Lo que podemos ver, con lo que ha sucedido hasta el momento, es que el Banco Mundial no está realmente interesado en hacer cumplir sus políticas de salvaguarda. Esto se evidencia con el espectacular fracaso para supervisar debidamente este Proyecto. Los dueños de los terrenos recibieron en promedio entre $40 y $80 como “pago completo y final” por los grandes predios de tierra que fueron adquiridos para el paso del gasoducto. Las comunidades no se dieron cuenta de que existía un procedimiento de queja y reparación, pero lo que es aún más chocante es el hecho de que el personal de WAPCO en la estación del compresor Badagry en Lagos informó al Profesor Ted Downing, un experto en reasentamientos del equipo del Panel de Inspección, que no existía un libro de registro de quejas en Nigeria.No se esperaba que las comunidades de Nigeria se quejaran!
Tal parece que el interés del Banco en este Proyecto no incluye la reducción de la pobreza, o las salvaguardas sociales o del medio ambiente. Su principal interÚs es el de capturar aptamente en el documento de la evaluación del proyecto que están “armonizando el marco de trabajo legal y político de los países participantes en África Occidental.” Para asegurar su objetivo, el Banco se aseguró de que a WAPCO le fueran conferidas grandes exenciones fiscales, ambientales y sociales por medio del Tratado WAGP y de su legislación facilitadora. El Tratado WAGP y la legislación facilitadora pasaron rápidamente por el Parlamento sin dar al público la oportunidad de contribuir al debate sobre la conveniencia del Proyecto. En complicidad con las compañías transnacionales y con otras IFIs, el Banco Mundial está poniendo los cimientos para futuros proyectos de energía centralizada, donde el suministro de la energía estará firmemente en las manos de unos pocos, y por lo tanto les dará control sin medida sobre la soberanía de nuestra energía.