Cada tres años tiene lugar una serie de reuniones para convencer a los países ricos a que pongan dinero en los cofres de la Asociación Internacional de Desarrollo del Banco Mundial (IDA – International Development Association). Este dinero permite que la IDA preste dinero sin interés y otorgue concesiones a los países más pobres del mundo. El primer reabastecimiento en 1960 totalizó $1.000 millones. IDA 14, el reabastecimiento más reciente que concluyó a principios del 2005 recaudó $33.000 millones de los cuales $18.000 millones fueron contribuciones de donantes. La mayor parte del crecimiento en términos reales ocurrió durante las primeras dos décadas; durante las ultimas dos décadas no se ha visto un verdadero crecimiento en las contribuciones de los donantes.
Los fondos de los donantes han contribuido con el 71 por ciento de los recursos de la IDA hasta la fecha. Históricamente los Estados Unidos son los mayores aportantes (22 por ciento), y le siguen Japón, Alemania, el Reino Unido y Francia como los cuatro siguientes. Debido a su gran contribución al reabastecimiento más reciente, el Reino Unido en el momento es el segundo mayor donante. La lista de los donantes también incluye a países ricos en petróleo como Arabia Saudita y Kuwait, lo mismo que a países recientemente industrializados y a algunos países de medianos ingresos. La contribución estadounidense, sin embargo, ha sufrido una disminución progresiva, de hecho, $525 millones prometidos por EU todavía no han sido cancelados.
Los ‘flujos internos’ complementan los recursos de los donantes. Estos representan el 23 por ciento de todos los recursos disponibles para la IDA. Esto incluye pagos principales de los prestatarios y de la renta de inversión. Estos recursos juegan un papel vital en la transición entre una vuelta de reabastecimiento y la siguiente, permitiendo el flujo continuado mientras los donantes se pelean para ver quién pagará y cuánto. El resto de los recursos de la IDA vienen de transferencias de otras ramas del Banco Mundial, del Banco Internacional para la Reconstrucción y el Desarrollo (IBRD) y de la Corporación Financiera Internacional (históricamente contribuyen con el 6 por ciento, aunque actualmente es del 9 por ciento). Esto significa que los países de medianos ingresos están haciendo una contribución a la IDA cuando pagan el interés de los préstamos del IBRD.
Habrá cuatro reuniones de la IDA durante el año 2007. La primera tuvo lugar en París en marzo. La segunda será en Mozambique en junio. La tercera se llevará a cabo en Washington, y la reunión final será de nuevo en Europa a finales del año. Lo más importante en estas reuniones son los compromisos financieros hechos por los países donantes. Esto requiere de delicadas negociaciones donde los funcionarios del Banco primero presentarán las propuestas en la reunión de Mozambique, en relación con el monto de la financiación que se considera que cada región de la IDA puede absorber, y luego los donantes responderán con los montos que ellos creen pueden donar.
Estas reuniones también se han convertido en oportunidades clave para que los gobiernos influencien la forma como se utilizarán los fondos. Las ‘condiciones’ que los donantes han puesto a sus fondos han aumentado con los años. Durante las negociaciones de la IDA 14 los donantes estuvieron de acuerdo en que el costo de las transacciones de todas estas condiciones era demasiado alto y convinieron la solución de priorizar un número limitado de ‘temas especiales’, y se elaboran indicadores para hacerle seguimiento. En diciembre del 2006, 16 países donantes pasaron 11 propuestas de temas especiales para la IDA 15 y en la primera reunión en marzo se seleccionaron tres temas: la arquitectura de la ayuda, la eficacia de la ayuda a nivel de país, y los ‘estados frágiles.’ (Ver Artículo 1 de este Boletín).
Alrededor de la mesa durante estas reuniones se encuentran empleados del Banco y representantes de la IDA de los países donantes. Estos son funcionarios civiles senior de los Ministerios de Desarrollo, Finanzas o de Asuntos Exteriores. En la IDA 14 por primera vez se permitió la entrada a ‘observadores’ de países del Sur. Para la IDA 15, una docena de representantes de los países prestatarios y cuatro observadores de países de medianos ingresos participaran en las reuniones. Ya que a los acuerdos en estas reuniones se llega mediante el consenso, la influencia de los representantes de estos países dependerá de su iniciativa personal. No se permite la presencia o participación de representantes de la sociedad civil.
Para finales del año el proceso se dirige a las capitales de los países donantes donde se dan los procesos presupuestales que han de acomodar los compromisos de las donaciones. Esto puede ser algo sencillo como en el Reino Unido, donde la contribución a la IDA se realiza por medio de la aprobación de los parlamentarios para toda la revisión de gastos departamentales. En contraste, en los Estados Unidos el Ministerio de Hacienda es responsable de asegurar los recursos del Congreso para cumplir con los compromisos de reabastecimiento de la IDA. El Congreso se ‘apropia’ de los fondos durante su ciclo anual de presupuesto congresista. En el pasado el Congreso ha utilizado estas oportunidades para tratar de influenciar la política del Ministerio de Hacienda estadounidense hacia la IDA, introduciendo legislación que requiere, por ejemplo, la restricción del voto sobre proyectos que no sean sensitivos con el medio ambiente.