Condicionalidad

Comentario

El FMI huye de Bangladesh

19 diciembre 2007 | Guest comment

Bangladesh se independizó en 1971, comenzó negociaciones con el FMI en 1972 y en 1973 tuvo su primera experiencia de diálogo político con la institución.

A principios de los años 70 cuando todavía no existían los préstamos de ajuste estructural del Banco o del Fondo, en su lugar había préstamos ligados a la reforma política doméstica. En los años 80 llegó oficialmente el Programa de Ajuste Estructural (SAP – Structural Adjustment Programme). En 1986 Bangladesh fue uno de los primeros países en utilizar la Facilidad del Ajuste Estructural del FMI. Bangladesh también fue uno de los pioneros en el uso de la Facilidad Aumentada del Ajuste Estructural (Enhanced Structural Adjustment Facility) de la misma institución. Durante los años siguientes la economía del país fue subordinada a las guías y metas del Documento del Marco de la Política preparado por el FMI y el Banco Mundial. A finales de los años 90, esas dos Instituciones produjeron el Documento Estratégico para la Reducción de la Pobreza e iniciaron su aplicación. Sin embargo ese documento no fue otra cosa que una endulzada SAP, con el mensaje de que para reducir la pobreza había que mantener o aún fortalecer las raíces de algunas de sus causas.

Durante todas estas fases las IFIs tuvieron una agenda común, crucial para que el capital global tuviera: una economía de mercado, un retorno extraordinario de sus inversiones y un espacio abierto para hacer lo que quisieran. Estos incluyeron: (a) un desmantelamiento de las instituciones y de las empresas públicas privando a las personas pero dando una autoridad inmensa a los grandes negocios; (b) quitar todo el apoyo y protección a las industrias y la agricultura locales al liberalizar las importaciones; (c) el apoyo de las actividades orientadas a la exportación para responder a las necesidades de los mercados occidentales, al proveer productos baratos a costa de la economía y el medio ambiente locales; (d) retirar la responsabilidad del estado para proveer el cuidado de la salud y la educación a sus ciudadanos; y (e) elevar el precio del combustible, el gas y la electricidad tanto como las tarifas para el cuidado de la salud y la educación, y así crear buenas oportunidades de negocios para las compañías globales.

En Bangladesh lanzaron un “NO” rotundo a la misión del FMI.

Con la implementación de estas prescripciones, Bangladesh, como muchos otros países, tuvo que tragarse todos los contratos desastrosos con las compañías multinacionales lo cual abrió la vía para el asalto a los recursos naturales, mientras se veía en silencio la erosión de las habilidades nacionales. Durante las dos últimas décadas Bangladesh vio el crecimiento de los recursos, la creación de una economía criminal escondida y corrupta y la afluencia de unos pocos a costa de la privación de muchos. De hecho, se fortaleció el proceso de la reproducción, no la reducción, de la pobreza y de la desigualdad. Durante los últimos diez años, aumentó el número de las personas que viven bajo la línea de la pobreza de 51 a 61 millones. Solo un 10% de la población se benefició con un aumento del PIB, mientras que éste se redujo para el 90% de la población.

La última invención del FMI es el Instrumento de Apoyo a la Política (PSI – Policy Support Instrument). La explicación de la versión del nuevo instrumento dice que aunque los países de bajos ingresos puedan no necesitar asistencia financiera, “todavía podrían buscar la asesoría, el seguimiento y el respaldo a sus políticas económicas de parte del FMI, lo que es llamado ‘señalización y apoyo político’…”

Uno podría ver que éste es un intento desesperado del FMI para extender su control sobre los países donde sus ‘representantes’ siguen en control. Esta fase de ‘control sin fondos’ es crítica para ellos.

Después del éxito de sus políticas conseguido en países como Nigeria, un caso de estudio de enormes recursos y mucha pobreza, una misión del FMI visitó a Dhaka en septiembre del 2007 para firmar un PSI y poner otra cadena alrededor del cuello del país. Pero la gente de Bangladesh no se comportó como esperaba la misión. Ahora que el resto del mundo pide un cambio, Bangladesh también lo pidió. Ellas/ellos dieron un “NO” rotundo a la misión. Personas de todas las secciones de la sociedad se unieron para registrar su protesta contra los planes del FMI. La misión del FMI encontró a sus aliados temblando y literalmente se escapó del país.

Sin embargo las misiones y las reuniones de FMI continúan: los desastrosos proyectos todavía están siendo propuestos. Por lo tanto, en noviembre del 2007, las/los académicos y activistas hicieron una declaración para formar un tribunal público con el objeto de juzgar los proyectos y las políticas del Banco Mundial, del FMI y del Banco Asiático de Desarrollo. Desde entonces se han estado formando grupos temáticos para proceder con este trabajo. Estos señores globales existen con base en los sistemas de gobierno frágiles y de las autoridades corruptas locales. Si la gente se levanta su fin es inminente.


Anu Mohammad, Department of Economics, Jahangirnagar University, Bangladesh, anujuniv@gmail.com