Un Informe del Grupo de Evaluación Interna del Banco sobre la electrificación rural encontró que solo el 7 por ciento de los proyectos de electrificación rural del Banco tiene un objetivo explícito de reducción de la pobreza. Aunque las tecnologías de energía renovable se están volviendo más baratas y disponibles, «los beneficios completos de proveer electricidad para las personas pobres no están siendo entregados» y los hogares que más beneficios derivan de la electrificación rural no se extienden a los de las personas pobres. El Banco promueve un abordaje que favorece a las comunidades más cercanas al sistema establecido de suministro existente como opción de «menor costo.» El estudio casi llega a la conclusión de que se necesitan subsidios públicos para que las personas pobres tengan acceso a la electricidad.
Casi nunca se dan consideraciones explícitas acerca de cómo incluir a las personas mas desfavorecidas