Al tiempo que la agenda política del FMI está regresando a la reforma del mandato y el gobierno, también hay un aumento de llamados para que el Fondo revise las políticas monetarias y fiscales que promueve, si es que la institución desea retener su legitimidad y estar a la altura de su mandato.
Un informe de finales de enero de 2010 de Acción para la Salud Global UK y de la campaña Pare el SIDA, examina los programas de nueve países, escogidos según la prevalencia del VIH/SIDA, para evaluar si los requisitos políticos del FMI dejan un espacio para que los países puedan escalar las intervenciones de la salud. Al tiempo que elogia el programa del FMI en Uganda por haber parado mayores cortes por parte del Ministerio de Finanzas, el estudio muestra que ‘a pesar de la retórica del cambio, y de las afirmaciones sobre una mayor flexibilidad, las políticas del FMI en los programas de los países todavía tienden a las prácticas macroeconómicas demasiado apretadas, con severos impactos en la habilidad gubernamental en su capacidad de inversión en la salud pública.’ Otros informes recientes también encontraron que el FMI estaba siendo menos flexible de lo necesario en los programas de respuesta a la crisis (ver Boletines 67 y 68).
El informe bandera anual de las agencias económicas de la ONU, Situación y Perspectivas de la Economía Mundial 2010, también critica las políticas del FMI. Publicado en diciembre de 2009, el informe encuentra que ‘a pesar de las intenciones tan proclamadas, muchos programas de país recientes del FMI contienen condiciones procíclicas que pueden exacerbar sin necesidad una caída económica en varios países en desarrollo.’
muchos programas de país recientes del FMI contienen condiciones procíclicas que pueden exacerbar sin necesidad una caída económica
El informe de la UNESCO, Monitoreo Global de la Educación para Todos 2010, que hace seguimiento a los compromisos de financiación para la educación, advierte que los programas del FMI pueden crear una presión deflacionaria, pues reducen el espacio fiscal necesario para escalar el gasto en la educación. El informe pregunta si las promesas de flexibilidad del FMI continuarán en el 2010.
¿Más flexible o más estricto?
Las demandas de austeridad del FMI continúan siendo controversiales. Los trabajadores (150,000) del sector público de Serbia aumentaron su presión sobre el gobierno en enero de 2010, cuando el FMI sugirió que se deberían hacer más esfuerzos, además del congelamiento de las pensiones y los salarios, en el área de cortes de personal y de la privatización. Letonia aprobó un 40 por ciento para el corte de salarios públicos y aumento de impuestos a comienzos de diciembre de 2009 (ver Boletines 66 y 68). Posteriormente un dictamen de la Corte Constitucional declaró que el corte al sector del salario público era inconstitucional, añadiendo Û250 millones (US$342 millones) al presupuesto. Se reporta que el FMI estuvo de acuerdo con permitir los pagos de pensiones sin que se afectaran los cortes de gastos en el 2010. El FMI y la Unión Europea dijeron que era posible que congelaran un préstamo de rescate de Û20.000 millones a Rumania (ver Boletín 68), después de que el nuevo parlamento prometió controlar el déficit presupuestario. Además de eliminar 100.000 empleos públicos, a comienzos de febrero el nuevo gobierno se comprometió a elevar la edad del retiro y a eliminar algunas categorías de pensiones.
Sierra Leona fue una de las pocas naciones africanas que se atrevió a desafiar aun el consejo leve del FMI sobre los déficits fiscales, cuando utilizó fondos para la infraestructura de labor intensiva. El profesor John Weeks, economista asesor del ministro de finanzas de Sierra Leona, elogió un paquete político que combina políticas de déficits más altos con un alivio monetario en la forma del dinero impreso, y pidió que ‘los donantes y el FMI dieran más ‘espacio político.’
Un informe económico del FMI anterior a la crisis criticó a Uzbekistán por sus intervenciones en el sector financiero, por las restricciones comerciales y el manejo de la tasa de cambio. Ahora el mismo país está siendo elogiado como un caso exitoso en un documento de la Universidad de Londres. Hasta los mismos miembros de Junta del FMI durante su visita en octubre de 2009, notaron que Uzbekistán estaba bien ‘debido a su cautelosa actitud en la participación en los mercados financieros globales.’
Principios de la política económica
Un nuevo libro publicado en diciembre de 2009, ‘Las fatales ideas del neoliberalismo: Cómo el FMI ha socavado la salud pública y la lucha contra el SIDA’ (The deadly ideas of neoliberalism: How the IMF has undermined public health and the fight against AIDS), afirma que ‘las políticas fiscales y monetarias del FMI equivalen a ‘una represión de la salud’.’ En la página web del FMI, el autor del libro, Rick Rowden, critica al Fondo por seguir fallando y no respondiendo en forma persistente a la principal crítica de los activistas de la salud – de que ‘la subyacente disposición ideológica del FMI’ prioriza las variables a corto plazo del sector financiero en la política macroeconómica en vez de dar atención a las variables reales del sector, como lo son las temas a largo plazo, la industrialización, el aumento del empleo y el aumento de la inversión pública.’ La respuesta de los miembros del personal del FMI enfatiza que el Fondo ha mostrado flexibilidad sobre las metas fiscales y monetarias durante la crisis financiera y que los programas apoyados por el FMI promueven el crecimiento.
El asunto clave es la falta de consenso sobre la definición de ‘estabilidad macroeconómica’. Los críticos como Rowden sin embargo, anotan que la preferencia del FMI por la inflación de un solo dígito y las metas de un solo dígito para el déficit fiscal no se ven apoyadas por la literatura de los economistas pares.
La Oficina de Rendición de Cuentas de Estados Unidos (GAO – US Government Accountability Office) publicó un informe sobre este asunto en noviembre de 2009, el cual fue prontamente criticado. El GAO concluye diciendo que ‘la evidencia empírica generalmente sugiere que la inflación es perjudicial para el crecimiento económico después de haber excedido un umbral crítico, el cual en general es consistente con las metas de inflación del FMI.’ Aunque citó 16 estudios empíricos en la bibliografía, el GAO solo analiza los nueve documentos sobre la relación entre inflación y el crecimiento publicados desde 1999. Luego el GAO abandonó tres de los nueve, por ‘razones metodológicas’, a pesar de que dos de ellos daban evidencia contraria a las metas del FMI. Sepultado en una nota de pie se encuentra esta admisión de que ‘este ejercicio no trata de decir que la literatura sea conclusiva.’
En su informe Situación Social Mundial, de enero de 2010, el Departamento Estadounidense para los Asuntos Económicos y Sociales afirma que las continuas declaraciones del FMI de que la inflación es mala para las personas pobres son bastante dudosas. Este informe dice que el FMI ignora el impacto positivo de la inflación en la creación de empleos, en la posición neta de deudor para la mayoría de las personas pobres, y las consecuencias negativas de un reducido gasto social durante las recesiones. ‘La estabilización debe ser definida en forma más general para incluir la estabilidad de la economía real’ la cual ‘puede requerir de mayores déficits fiscales y de mayores tasas de inflación que las prescritas en la mezcla de la política convencional macroeconómica.’