Gobernanza de las IFI

Antecedentes

China y el Banco Mundial

28 septiembre 2011 | Al interior de las instituciones

China se unió al Banco Mundial en abril de 1980, y desde entonces ha sido uno de sus mayores prestatarios y receptores de asistencia técnica. En los últimos años, China ha ido más allá de tener sólo una función como país receptor, pasando a tener una voz con influencia en el Banco.

China fue primero un país receptor de la Asociación Internacional de Fomento (AIF), el brazo para países de bajos ingresos del Banco, la cual hasta el año 1999 había proporcionado al país US$ 9,95 mil millones en préstamos en condiciones favorables. En ese entonces China fue clasificada como un país de ingresos medianos, y por lo tanto se convirtió en un receptor de préstamos del Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento (BIRF), el brazo de préstamos del Banco Mundial para países con medianos ingresos. Para el año 2011, China había prestado US$ 39,8 mil millones del BIRF. Los lazos con la Corporación Financiera Internacional (CFI), brazo del Banco para el sector privado, fueron forjados más lentamente. De 1985 a 1991, sólo hubo cinco proyectos en China apoyados por la CFI. Los compromisos empezaron a aumentar en la década de 1990, especialmente en inversiones del mercado financiero. Para 2011, la CFI había prestado a las empresas chinas US$ 4 mil millones para 160 proyectos.

A pesar de que la magnitud de la asistencia financiera del Banco a China es importante, los desembolsos nunca superaron el 1 por ciento del PIB del país. La asesoría sobre políticas y la transferencia de conocimientos han sido transmitidas a través de estudios conjuntos, programas de capacitación para la financiación de los funcionarios de proyecto, y la asistencia técnica (AT). Los proyectos del Banco de asistencia técnica se han centrado en: la reforma de las pensiones, la reforma de la vivienda urbana, la reforma del mercado de energía, la protección del medio ambiente, el desarrollo del mercado de trabajo, el desarrollo de redes de seguridad social, la liberalización de los tipos de interés y la liberalización del comercio exterior.

En 1999, serios problemas con el Proyecto de Reducción de la Pobreza Gansu y Mongolia Interior dañaron la reputación del Banco Mundial en China. El proyecto incluía un dique de 40 metros que habría desplazado a 60.000 personas en la provincia de Qinghai. Sin embargo, el Panel de Inspección del Banco en 2000 encontró que el personal del Banco había quebrantado siete directivas del Banco durante la evaluación del proyecto. Después de una dura batalla política, la Junta Directiva del Banco decidió retirar el componente de financiación del proyecto de Qinghai.

China, ahora clasificada como un país de ingresos medianos altos, utiliza al Banco principalmente para la financiación de proyectos de pequeña escala. La actual Estrategia de Alianza Global para el País, del Grupo del Banco Mundial redactada en 2006, clasifica las actividades del Banco en cinco ejes estratégicos: la integración de China en la economía mundial; la reducción de la pobreza; la desigualdad y la exclusión social; la gestión de la escasez de recursos y de los problemas ambientales; la financiación sostenible y el crecimiento eficiente; y la mejora de las instituciones públicas y de mercado. En 2010, el Banco prestó US$ 1,44 mil millones a China.

La influencia de China está creciendo en el Banco Mundial. Este cambio ha sido señalado por el nombramiento de chinos para cargos de alto nivel y por cambios en el poder de voto. En abril de 2008, Justin Lin Yiju, un miembro del Partido Comunista de China, fue nombrado economista jefe del Banco. En abril de 2010, cuando los países desarrollados acordaron renunciar a una pequeña parte de sus cuotas de voto a favor de los países emergentes (ver Boletín 70), China aumentó ligeramente su poder de voto. China ahora tiene el 2,72 por ciento de los votos en el BIRF, el 1,02 por ciento en la CFI, el 2,05 por ciento en la AIF y el 2,64 por ciento en el Organismo Multilateral de Garantía de Inversiones, una rama de seguros del sector privado del Banco. China también tiene una silla en el directorio del Banco de 25 miembros.

Para hacer valer su creciente papel en el Banco, China se convirtió en donante a pequeña escala de la AIF en 2008, con un aporte de US$ 26 millones para la reposición de la AIF 15. El año pasado, además de una contribución normal de US$ 161 millones, China también se comprometió a hacer un pago anticipado voluntario de sus propios créditos de la AIF de US$ 1 mil millones para que hubiera más recursos disponibles para la reposición de la AIF 16, el año pasado.

China también influye en el Banco indirectamente, al ser un prestamista alternativo para otros países en desarrollo. En enero de 2011, una investigación del periódico del Reino Unido, Financial Times, encontró que el China Development Bank y el Export-Import Bank de China (Eximbank) habían prestado por lo menos US$ 110 mil millones a los países en desarrollo, entre mediados de 2008 y mediados de 2010, lo cual es una cantidad superior a los préstamos concedidos por el Banco durante el mismo período. Como resultado, el Banco ha tratado de aumentar la cooperación con los bancos chinos. Un memorando de entendimiento entre China Eximbank y el Banco Mundial fue firmado en mayo de 2007 para colaborar en proyectos de carreteras e inversiones en África.