En junio de 2016, un grupo de 35 ONGs de todo el mundo hizo una presentación conjunta al Banco Mundial y el FMI sobre su actual revisión del Marco de Sostenibilidad de la Deuda (DSF – Debt Sustainability Framework). El DSF establece el proceso de las Evaluaciones de la Sostenibilidad de la Deuda (DSAs – Debt Sustainability Assessments) para los países que están autorizados a pedir prestado en condiciones favorables al Banco o el Fondo. Esto incluye todos los países de bajos ingresos, así como algunos países de ingresos medianos.
La presentación de las ONGs, cuyos firmantes incluyen redes internacionales, como el Foro Africano sobre Deuda y Desarrollo (AFRODAD), y grupos nacionales como Caritas Honduras, establece 10 recomendaciones para la revisión del DSF. Las ONGs también piden que las evaluaciones futuras sean llevadas a cabo de forma independiente y que la sostenibilidad de las deudas sea evaluada teniendo en cuenta las necesidades básicas de los Estados tal como se establece en los Objetivos de Desarrollo Sostenible y, no sólo por la capacidad de pago. Por otro lado, la presentación exigió que en contraste con el enfoque actual, que no hace tal distinción, el DSF apoye la inversión productiva en los Estados incluso si se incurre en más deuda a corto plazo, siempre y cuando la inversión factiblemente “muestre que va a mejorar la situación de la deuda a través de los ingresos generados por el gobierno, con un impacto positivo en la reducción de la pobreza y la desigualdad».
Una recomendación adicional de la presentación de las ONGs, es que el DSF “incluya los pasivos actualmente ocultos», en particular debido a la prevalencia de las asociaciones público-privadas (APPs), con frecuencia respaldadas por el Banco y el Fondo, que los gobiernos pueden utilizar para ocultar la deuda relacionada con los costos APPs que son más caros que los préstamos directos (ver Observador Verano 2016, Primavera 2016). La presentación pide además que el Marco de Sostenibilidad de la Deuda (DSF): utilice como el más importante indicador la relación entre el servicio de la deuda y los ingresos del gobierno; incluya la deuda interna al tiempo que mantiene la distinción con la deuda externa; lleve a cabo más trabajo sobre la deuda privada externa; revise los enfoques de las pruebas de tensión existentes; e incluya a todos los países en el DSF porque “las crisis de la deuda pueden surgir en cualquier país, sin importar su nivel de ingresos.»
Tirivangani Mutazu de AFRODAD comentó, «las Evaluaciones de la Sostenibilidad de la Deuda deben enfrentar el exceso de endeudamiento de todos los países que lo merezcan… incluidos los países de medianos ingresos en África, como Kenia, Nigeria y Sudáfrica. Los cálculos de sostenibilidad de la deuda deben hacerse dando una seria consideración a los costos de cumplimiento con los nuevos Objetivos de Desarrollo Sostenible. La sostenibilidad de la deuda también debe basarse en las necesidades de bienestar y desarrollo de un país».