En noviembre, organizaciones de la sociedad civil (OSC) participaron en audiencias celebradas por el Comité de Servicios Financieros de la Cámara de Estados Unidos, en Washington DC, las cuales incluían el escrutinio de los USD 5.500 millones de incremento de capital propuesto para la Corporación Financiera Internacional (CFI), el brazo del sector privado del Banco Mundial (véase el Observador de Verano de 2018).
Como resultado de la ampliación de capital, debe haber una disminución de entre el 22% y el 17% en la participación de Estados unidos en el paquete accionario total de la CFI, aunque se mantiene el poder de veto de facto de Estados Unidos sobre decisiones importantes de la CFI. Si bien Estados Unidos no contribuye directamente a la ampliación de capital de la CFI con financiación adicional, la aprobación del Congreso de Estados Unidos para cambiar su posición accionaria es un requisito previo para seguir adelante con la ampliación de capital de toda la CFI.
La presidente del Comité, Maxine Waters, había expresado su preocupación por la rendición de cuentas y la transparencia de las actividades de la CFI, incluyendo la Ventana para el Sector Privado (PSW, por su sigla en inglés) de la Asociación Internacional de Fomento (AIF), el brazo del Banco Mundial para los países de ingreso bajo (véase el Observador de Verano de 2019). Waters volvió a aclarar su posición en la audiencia de noviembre, afirmando que, a menos que se realicen reformas estructurales, incluso en relación con las inversiones de la PSW y los intermediarios financieros, “simplemente no está interesada” en apoyar la ampliación de capital de la CFI.
Las OSC reiteraron las preocupaciones planteadas durante los debates en torno a la ampliación general de capital del Banco Mundial el año pasado, en cuanto a la necesidad de reformas sustanciales para abordar las viejas preocupaciones en materia de la rendición de cuentas, el medio ambiente y los derechos humanos, sin las cuales, un aumento de capital podría exacerbar los problemas existentes dentro de la institución (véase el Dispatch de Primavera de 2018).
Jolie Schwarz, de la OSC Bank Information Center, de Estados Unidos, destacó la necesidad de que el Congreso impulse reformas estructurales específicas, como la creación de un fondo de reparación en la CFI. Nadia Daar, de la oficina de Oxfam International en Washington DC, instó al comité a “utilizar su función de supervisión del Congreso para hacer que la CFI rinda cuentas sobre esas normas [de la CFI] y a promover una vía clara hacia la requerida divulgación del portafolio de los intermediarios financieros de la CFI” (véase el Observador de Verano de 2016), además de pedir que se ponga fin al apoyo de la CFI a los proveedores de educación con fines de lucro.
Este artículo se ha actualizado el 13 de diciembre para reflejar una mayor precisión en cuanto a la participación de Estados Unidos en la ampliación de capital de la CFI. La versión PDF contiene la edición anterior del mismo.