El Defensor del Pueblo (CAO, por su sigla en inglés), el mecanismo de rendición de cuentas independiente de la Corporación Financiera Internacional (CFI), el brazo de préstamos del sector privado del Banco Mundial, publicó un informe en octubre en el que expresó “preocupaciones sustanciales” sobre la inversión de USD 13,5 millones de la CFI en la controvertida cadena multinacional de escuelas con fines de lucro Bridge International Academies (BIA), anunciando que llevará a cabo una investigación del cumplimiento (véase el Observador de Primavera de 2018). La decisión se lleva a cabo en el contexto de las actuales campañas para poner fin al apoyo del Banco Mundial a la educación privada y garantizar, en su lugar, que contribuya a la expansión de la educación pública.
El informe aparece después de que, en abril de 2018, la organización de la sociedad civil (OSC) keniana East African Centre for Human Rights (EACHRights) presentara un reclamo al CAO describiendo las presuntas violaciones de BIA a las normas de desempeño social y ambiental de la CFI y las violaciones a la ley de derechos humanos. El CAO advirtió sobre la “adhesión de BIA a los requisitos de salud y seguridad pertinentes” y los posibles “impactos adversos para los maestros, padres y estudiantes planteados en los reclamos”. El CAO identificó, además, preocupaciones sobre la supervisión de la CFI sobre el desempeño de su propio cliente.
La OSC acogió con beneplácito la investigación como un paso adelante en la larga lucha contra la comercialización de la educación en los países de bajos ingresos, que sigue a recientes triunfos, como el reconocimiento de los Principios de Abiyán en una resolución del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas (véase el Observador de Verano de 2019) y la decisión de la Alianza Mundial para la Educación en junio de prohibir que sus fondos apoyen la educación con fines de lucro.
En un comunicado de prensa, la Dra. Judith Oloo, de EACHRights, comentó: “… Esperamos una investigación rigurosa y exhaustiva y pedimos a todos los inversores que empiecen a tomar medidas para evitar más daños”.