La Cuarta Conferencia Internacional sobre la Financiación para el Desarrollo (FpD) de este año, que se llevará a cabo en Sevilla, del 30 de junio al 3 de julio, presenta una oportunidad crucial para que la sociedad civil haga frente a las desigualdades sistémicas en la arquitectura financiera internacional. La clave entre ellas es la igualdad de género. Grupos feministas en el Mecanismo sobre FpD de la sociedad civil han argumentado que así como la economía está marcada por el género, también lo están las estructuras que perpetúan la desigualdad global, la extracción y la concentración de la riqueza. El género es una cuestión transversal que afecta a todas las áreas del desarrollo económico.
Un análisis feminista va más allá de lo discursos de ‘empoderamiento de las mujeres’ y la instrumentalización de la participación de las mujeres en la economía con el fin de promover una estructura desigual (véase el Observador de Otoño de 2024 y el de Verano de 2024). Las demandas de la línea de trabajo feminista del Mecanismo, para el logro de la igualdad de género y raza, y el respeto pleno de los derechos humanos y las libertades fundamentales, a través de una transformación sistémica de la arquitectura financiera, comercial y tributaria internacional, son pertinentes dados los recientes retrocesos en materia de género (véase el Observador de Primavera de 2025).
Las feministas se están movilizando a nivel regional y mundial. Del 13 al 18 de mayo en Rabat, Marruecos, se llevará adelante una Escuela de Economía Feminista de Oriente Medio y Norte de África (MENA, por su sigla en inglés) para compartir y desarrollar conocimientos del proceso de FpD entre feministas panafricanas y de MENA, y una convocatoria feminista mundial para posibilitar la elaboración de estrategias feministas colectivas.